Cómo adaptarse al final del tratamiento

Para ayudar a su hijo a adaptarse a los desafíos emocionales de la vida después del tratamiento, considere lo siguiente:

• Ayúdelo a trabajar con su equipo de atención para crear un futuro plan de atención de seguimiento para la supervivencia y un plan de tratamiento, si es necesario

• Contáctese con otros padres cuyos hijos se hayan recuperado del cáncer

• Informe al equipo de atención de su hijo sobre cualquier inquietud sobre el regreso a las rutinas anteriores

• Pida a los miembros del equipo de atención que ayuden a abordar los temores de que el cáncer regrese

Usted y su hijo también pueden encontrar otras dificultades para volver a sus antiguas rutinas antes del tratamiento contra el cáncer. Por ejemplo, su hijo puede sentir que se ha atrasado en la escuela. También puede pensar que se ha perdido actividades sociales. Para ayudarlo a regresar a estos aspectos de la vida, haga lo siguiente:

• Proporcione tiempo constante para jugar. Para un niño más pequeño, esto puede significar programar citas para jugar.

• Haga que regrese a la escuela tan pronto como pueda. Esto puede significar trabajar con los maestros para determinar las adaptaciones necesarias.

• Involucre a su hijo en actividades que lo entusiasmen. Anímelo a unirse a un club escolar o comunitario, practicar un deporte o practicar un instrumento musical si su proveedor lo autoriza.

• Promueva la independencia reevaluando algunas reglas antiguas, dependiendo de la edad de su hijo. Es importante que su hijo sienta que está tomando el control de su vida posterior al tratamiento.

Cómo ayudar a su hijo a convertirse en su propio defensor

Es importante que su hijo aprenda a convertirse en su propio defensor de la atención médica. Es una habilidad que necesitará mientras maneja su atención posterior al tratamiento hasta la edad adulta. Si tiene la edad suficiente para hacerlo, ayúdelo a crear y mantener un plan de atención de supervivencia. Este plan servirá como una guía vital hacia una vida sana.

Estos planes pueden incluir lo siguiente:

• Detalles del cáncer, como lugar, estadio y tipo

• Fechas y horarios de todos los tratamientos

• Detalles del tratamiento, como el tipo de tratamiento, los medicamentos utilizados y los efectos secundarios

• Información de contacto de cualquier centro de tratamiento al que haya ido su hijo

• Los principales proveedores de su hijo, incluidos nutricionistas, fisioterapeutas y consejeros

Un plan de atención de seguimiento también debe incluir medidas proactivas. Estas pueden incluir los siguientes:

• Cómo manejar los efectos secundarios del tratamiento

• Calendario de exámenes y pruebas de seguimiento que su hijo pueda necesitar

• Cualquier efecto secundario tardío que su hijo pueda experimentar debido al tratamiento y cómo controlarlo

• Derivaciones a cualquier especialista en el que pueda confiar

Anime a su hijo a desempeñar una función activa en el mantenimiento de su plan de atención de supervivencia. Puede hacerlo permitiéndole guiar las conversaciones con los equipos de atención. Enséñele a anotar cualquier efecto secundario que pueda tener en su plan para referencia futura. También puede considerar dejarle tomar el control de programar controles futuros si está listo.

Para obtener más información sobre los planes de atención para la supervivencia, puede utilizar herramientas en línea como el plan de atención para la supervivencia de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (American Society of Clinical Oncology).

Cómo vivir una vida saludable después del tratamiento

Es cierto que los sobrevivientes de cáncer tienen un mayor riesgo de sufrir problemas de salud en el futuro. Pero su hijo puede combatir algunos de estos riesgos moviéndose más y practicando hábitos alimentarios saludables.

La actividad física puede parecer desalentadora para usted y su hijo después del tratamiento. Esta ansiedad es comprensible. Recuerde que lo más importante es involucrar a su hijo en actividades físicas que disfrute. Esto lo ayudará a crear una rutina que le funcione en el futuro. Haga que se mueva y se divierta involucrándolo en lo siguiente:

• Practicar deportes en equipo

• Andar en bicicleta

• Hacer senderismo

• Bailar

• Nadar

• Caminar o correr

Hable con el equipo de atención de su hijo antes de que comience nuevas actividades físicas, especialmente actividades de alto riesgo como andar en patineta o deportes de contacto. Juntos pueden decidir qué actividades funcionarán mejor.

Al considerar los hábitos alimentarios de su hijo, intente lo siguiente:

• Incorpore más frutas y verduras.

• Reemplace las carnes de res y procesadas con proteínas magras, como aves, frutos de mar y frijoles.

• Incluya panes integrales, pastas y cereales elaborados con cebada y avena.

• Manténgase hidratado con agua y jugos bajos en azúcar

Algunos de estos alimentos pueden ser costosos o difíciles de encontrar. Pero hay formas de comer sano con un presupuesto limitado. Para obtener consejos, consulte MyPlate.

Mantener un peso saludable es importante para reducir la posibilidad de sufrir otros cánceres en el futuro y el riesgo de otras enfermedades crónicas a medida que su hijo crezca.